martes, 20 de octubre de 2015

Nuevos Vengadores de Ewing y Sandoval en 11 viñetas alternativas, algunas reales


Y llegó el día, en el que los héroes más serie B de Marvel Cómics se unieron para hacer frente a lo imposible y volverse manga. Ese día nacieron los Nuevos Vengadores de Al Ewing y Gerardo Sandoval, cuarto volumen de la cabecera creada por Brian Michael Bendis, y que continúa la tradición de coger una de las piezas de la anterior colección y reimaginar el título en una dirección completamente diferente. Del enfoque urbano de Bendis a los Illuminati de Hickman, el guionista de 'Loki: Agente de Asgard' y 'Poderosos Vengadores' se une con el dibujante de la nueva 'Era del Apocalipsis' para dar comienzo a una nueva andadura en la 'All-New All-Different Marvel'. ¿Que podemos encontrar en esta nueva encarnación de los Nuevos Vengadores y su primer número?

Manga por hombro: Hace unos meses Marvel publicó el especial 'Ataque a los Vengadores', en el que los héroes más poderosos de la Tierra hacían frente a la creación de Hajime Isayama ('Ataque a los Titanes'). Según tengo entendido, el crossover fue un éxito en cuanto a distribución, siendo una muestra más de la maquiavélica astucia de la editorial lanzar una nueva serie los Vengadores puramente Manga con los lápices de Gerardo Sandoval. Combinando una de las creaciones de los Nuevos Vengadores de Hickman junto a elementos propios y otros de los Jóvenes Vengadores de Kieron Gillen, Al Ewing crea lo que podríamos definir como la versión 'Slayers' ('スレイヤーズ') de 'Authority'. Sci-fi desatada con conceptos que desafían la lógica, humor irreverente y efervescencia juvenil. Marvel se pasa al Manga, aunque quizás un manga que sabe demasiado al de hace veinte años. ¿Funcionará entre la audiencia actual? 

Humor inglés: Leer la primera página con su “Desearía poder hablar francés”, pasar a la siguiente. Volver atrás y quedarse con la mirada fija para empezar a reirme como un enfermo. Muy sútil, Ewing, muy sútil (y no lo único que me ha hecho soltar unas buenas risas a lo largo del cómic).

Dobles parejas: Tanto Wiccan y Hulkling como pareja como Tigre Blanco y Power Man como no pareja parece que serán los responsables de ofrecer contenido humano a la colección. De momento tampoco es que destaquen demasiado más allá de meros figurantes que comentan la jugada, por lo que está por ver si Ewing sabrá sacarles partido.

and Squirrel Girl y Tippy Toe: Verdaderas estrellas de la función, la forma de integrar la disparatada versión del personaje en la serie de Ryan North y Erica Henderson en una serie de corte más serio sin que quede fuera de lugar es brillante. Sin con Slott la coña de la Chica Ardilla era ser capaz de salir airosa de los más demenciales enfrentamientos contra los villanos más poderosos del universo Marvel, Ewing le da la vuelta a la tortilla descubriendo a Doreen como alguien capaz de procesar, hablar y hacer referencias a complejos conceptos científicos y metafísicos con una sencillez al borde de la locura. Amor a primera vista.


Ceoing like a boss: Si viajásemos en el tiempo para decirle a un lector de los ochenta que el Mancha Solar de los Nuevos Mutantes terminaría liderando un grupo de Vengadores probablemente terminaría riéndose en nuestra cara. Pero aquí esta y es carismático, divertido y con un grado de temeridad brillante al borde de lo insensato. Una suerte de excéntrico genio de las finanzas modelado a imagen de todos los Zuckerberg de nuestro tiempo, a medio camino entre una versión pasada de rosca de Tony Stark, el Maxwell Lord de sus buenos tiempos y... bueno, el Roberto DaCosta de toda la vida. Las soluciones laterales y la gestión de empresa son su superpoder para el segundo mejor ingrediente de la serie.


Aquellos años locos de Hickman
Not My Hawkeye: ¿#TeamClintBarton o #TeamKateBishop? El debate está servido. 

Ewing lo tiene claro
Logística: En un mundo real, la estructura clásica de los grupos de superhéroes es insuficiente. El Capitán América, Iron Man y compañía reparten las tortas para volver a su barroca mansión donde les espera el mayordomo, sí. Pero quién se encarga de mantener a punto sus equipos, de remendarles los trajes, de prepararles la comida con una dieta equilibrada, planificar sus entrenamientos mientras ellos están salvando el día, mantener las comunicaciones abiertas las 24 horas, establecer turnos para que el grupo esté activo en todo momento, coordinarlos desde casa, minimizar los posibles daños, recoger los escombros correspondientes o ponerse en contacto con las autoridades. Demasiado para un solo Jarvis, cuando lo normal sería que hubiera más gente asistiendo al grupo principal de la que está operando en el mismo grupo. Parte de la magia de lo imposible del género, que Ewing decide enfocarlo de otra forma para hacer la serie todavía más manga: Como en Mazinger Z o Pacific Rim, hay todo un equipo de personas operando detrás de estos AIMvengers.


El Teléfono de los Muertos: En 1920 Thomas Alba Edison desarrolló un teléfono con el que pretendía comunicarse con los muertos. Una extraña nota en el curriculum del famoso inventor y primer extorsionador del lobby de las eléctricas, fruto de una época en la que el esoterismo estaba a la orden del día. Abordando la sci-fi desde la vertiente más desmadrada de la creatividad de lo imposible, Ewing parece versionar a Edison con la primera amenaza a la que hacen frente estos Nuevos Vengadores con un sistema que convina cristales piezoeléctricos hechos de almas y wiccas urbanas de cinco puntas a la mejor tradición de Alan Moore. ¿Creada por quién? Por alguien que en terminos de inteligencia y maldad poco tiene que envidiarle a Edison.

Evil genius: New Avengers no deja de ser una versión de los Jóvenes Vengadores de Gillen cambiando el pop juvenil por el shonen manga de toda la vida. Como en tal, hacía falta un brillante genio del mal que pudiera elevarse como antagonista perfecto de la nueva IMA+Vengadores de DaCosta, pero -sobre todo- un sicario directo al que pudiera exponer sus planes sobre la marcha como dicta el género. Esto deriva en una aproximación algo más caricaturesca de del personaje, no demasiado pero si más de clásico científico diabólico de mirada fría y gafas que elevar constantemente como signo de maldad que como el imparable avance científico privado de restricciones morales y humanas al que nos tenían acostumbrados en la mejor de sus etapas.
Tener gafas. Símbolo del mal
¿Dónde están la gente Cebra? Pues eso Ewing. De paso tampoco estaría mal saber a donde han ido a parar Bala de Cañón y Pegadora con su hijo, Validadora o Shang Chi. Nos es que sea necesario para el primer número, pero espero que esté planificado a largo plazo.

BSO asociada: Maximum the Hormone 


Otras opiniones: A Joe Runner no le apasiona demasiado Gerardo Sandoval en Zona Zhero

1 comentario:

  1. Pues tú y Ander (Reverend) me hacéis ver algo en la serie que yo no vi: magnetismo. Le di una releída por aquello de ver mejor aquello que se suele dejar uno a simple leída. Y sí, me gustó bastante más que la primera vez (debería haberlo hecho antes de escribir aquello), pero el dibujo sigue siendo un lastre para mí. Eso no quita que no vaya a seguir la serie, porque Ewing.

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