Alguien
debería hacer en algún momento un repaso histórico a la evolución
de los personajes femeninos en la pantalla, señalando a aquellos que
con su contribución hayan roto cadenas con forma de tropos,
objetivización y otras condenas ficcionales (que no ficticias). En
nuestra historia reciente pocos ejemplos vamos a encontrar tan
significativos como el de 'Mad
Max: Furia en la Carretera',
con saber hacer al tomar prestado otro clásico de los personajes
femeninos -el de las mujeres desvalidas
haciendo frente al opresor masculino- para darle un sonoro empujón
por encima de donde todos los tímidos sucedáneos de 'Thelma y
Louis' lo habían dejado.